Aquella puerta
Embriagando la mente con el sabor amargo de una desicion, mientras un paraiso se derrumba desde los cielos, en su gracia deja atras solo desconsuelo; deja sus fragmentos por el suelo. Sus habitantes, sus angeles moribundos lloran su destierro. Todos han de odiar al que hizo esto, solo a uno, lo maldicen en nombre de los Dioces, maldicen su incensata existencia y lascivia.
-Grita tus pecados!!!- Las palabras de los turbados celestiales, con ojos esmaltados en lagrimas cuaguladas y parpados susurrantes.
-No exijo perdon- Se escucha su voz susurrar, y sus palabras estan llenas de la lujuria de un cielo perdido en elrecuerdo.
Su demencia no cabe en los corazones de metralla; mas el intenta hacer uno, juntando trozo a trozo el roto acero que perforo su coraza, inspirado en crear un corazon. No podría imaginar que nunca lo lograra, nunca podria sentir nuevamente anhelo.
-Desiste de este paraiso! Largate!- Surcan como truenos las palabras de sus egos, tartamudeando en sus oidos las voces de sus destierros; como cortes sobre papel terminan de arrebatarle la cordura, esa mínima fragcion de conciencia en sanidad.
-Han de sacarme a la fuerza- Utiliza las palabra soara darse animos a si mismo en fracaso mientras sus pasos trazan un sendero de salida.
Y la puerta de aquel abismo se escuchar cerrar el infierno que el mismo quiso crear para aquellas que se atrevieran a observar el poco amor que dentro de el quizo colocar...
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